Decoración en positivo y mensajes optimistas humanizan la asistencia y facilitan la visita del paciente al Hospital Universitario Infanta Elena
- Personal de Enfermería del centro han diseñado una serie de carteles dirigidos a pacientes y a trabajadores y han personalizado la sala de extracciones de sangre para hacer más agradable la estancia en el hospital.
Los profesionales del Hospital Universitario Infanta Elena
, integrado en la red sanitaria pública madrileña, en línea con su política de Humanización en Asistencia Sanitaria, han puesto en marcha un doble proyecto dirigido a hacer más agradable el paso de sus pacientes por las instalaciones del centro. Se trata, en el primer caso, de una iniciativa denominada "Humanizando la espera" y, en el segundo, de una personalización con mensajes en positivo de la zona del hospital destinada a las extracciones de sangre.
"Lo bueno y lo positivo hay que repartirlo y, si bien hay situaciones en las que es difícil sonreír, con nuestra iniciativa ayudamos a conseguirlo, a que se nos escape una sonrisa viendo nuestros carteles". Rocío Rodríguez San Bonifacio y Almudena Tovar Peiro, técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) y enfermera, respectivamente, del hospital de Valdemoro, se refieren así a una serie de carteles diseñados por ellas que contienen mensajes positivos dirigidos a pacientes y a trabajadoras y que se han distribuido por distintos puntos del centro.
Una idea que, como recuerdan, "surgió tras escribir un día en una pizarra de la planta un mensaje que decía ‘Hoy me he puesto una sonrisa que combina con todo’, y al que los compañeros reaccionaron con mucha alegría, fotografiándolo y difundiéndolo en redes sociales, comentando lo estupendo que era comenzar así el día".
Eso alentó a Rodríguez San Bonifacio y Tovar Peiro a repetir la iniciativa hasta plantearse volcarla en diseños que permitieran que estos mensajes no se borraran cada día y así aumentar el efecto positivo en pacientes y, también, por supuesto, compañeros. Y es que, "lo positivo atrae lo positivo y, al fin y al cabo, somos muchos los que pasamos muchas horas y convivimos en el hospital", aseveran.
Mensajes para cada ubicación
Así, comenzaron con un cartel y ya llevan cuatro, distribuidos en diferentes puntos clave del hospital. El primero de ellos está ubicado en la sala de espera del servicio de Cardiología, y muestra un gran corazón rodeado de palabras relativas a sentimientos: "respecto, amor por nuestro trabajo, empatía… todos ello sentimientos del personal que transmitimos a nuestros pacientes", explican las enfermeras, indicando que esperan que sus mensajes ayuden "no sólo a pasar mejor el día, si no a esperar más relajados para ser atendidos en consulta".
El pasillo de hospitalización Materno-Infantil acoge el segundo cartel lleno de positividad, tanto en palabras como en imágenes, porque, como aseguran sus autoras, "los pensamientos alegres son la mejor medicina, y no hay mejor medicina que una sonrisa, sobre todo con los niños".
También en un pasillo, pero en este caso el de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) y paritorio, se ubica el tercer diseño, en el que se destaca la complicidad entre pacientes y personal que les atiende, un vínculo fundamental en este sector, no sólo por sus comprobados efectos beneficiosos sobre el cuidado de la salud, la confianza y el cumplimiento terapéutico, entre otros, sino por el mucho tiempo que numerosos pacientes pasan en el hospital.
El último cartel, y además el más grande, se ubica a la entrada de CMA, donde se recibe a todos los pacientes que van a pasar a quirófano, y que ahora pueden ver antes de operarse una imagen que "engloba todo lo que queremos decir -continúan Rodríguez San Bonifacio y Tovar Peiro-: en este hospital somos positivos, los problemas son retos, no obstáculos, compartimos triunfos, trabajamos en equipo, amamos lo que hacemos, somos proactivos y siempre nos ponemos en tu lugar".
Decoración en positivo de la sala de extracciones
Una filosofía en positivo en la que también se enmarca el proyecto de decoración de la sala de extracciones del hospital, iniciativa de la TCAE Mercedes Medina Leal, cuya afición a la pintura empezó volcando en un cuadro expuesto en la Unidad de Donación.
A partir de ahí, su vocación le llevó a personalizar el box pediátrico de extracciones, y posteriormente el resto de la sala; en el caso del primero, con colores muy vivos y dibujos pensados para llamar la atención y alegrar a los pacientes más pequeños, "que a veces vienen muy malitos y con mucho miedo, y al menos así intentamos hacerles más agradable y entretenida su visita, que parezca que no están en un hospital, y endulzamos un trago difícil tanto para ellos como para sus padres", como es una extracción de sangre, dice Medina Leal.
En cuanto al box de adultos, sus colores tranquilos y suaves y sus mensajes optimistas consiguen relajar al resto de pacientes. También para ellos, insiste la autora de estas creaciones, cambios como éste "son granitos de arena para que las cosas que son un poco traumáticas se vean de diferente manera".
Se trata de una mirada distinta que llega tanto a pacientes como personal, ya que ambos colectivos tienen claro que el panorama mejora, ya sea desde el punto de vista de los primeros, que encuentran la iniciativa poco común, original y positiva, como para los segundos, a quienes, aseguran, les "cambia la perspectiva de trabajo" al entrar en un espacio tan cargado de optimismo.
