El Hospital Universitario Infanta Elena recibe la Medalla de Oro de la Villa de Valdemoro por su labor en la lucha contra el Covid-19
En un acto presidido por Díaz Ayuso y organizado por el Ayuntamiento del municipio como homenaje a las víctimas del Covid y a los trabajadores de servicios esenciales que desempeñaron su labor durante el estado de alarma
- El gerente del hospital agradeció en nombre del personal del hospital el reconocimiento, "que es todo un honor para nosotros y que llevaremos con el orgullo y compromiso de lo que representa"
- Los trabajadores del hospital han dado lo mejor de cada uno, siempre con una sonrisa, haciendo posible seguir atendiendo a todos los pacientes no Covid que lo necesitaron durante la fase más aguda de la pandemia, y reactivar la actividad asistencial en las últimas semanas en un contexto seguro
- Actualmente, el hospital está preparado para afrontar cualquier tipo de escenario, con protocolos eficaces y de rápida implementación, conocimientos mejorados y ampliados, dotación suficiente y profesionales preparados y experimentados
El Hospital Universitario Infanta Elena, integrado en la red sanitaria pública madrileña, recibió ayer la Medalla de Oro de la Villa de Valdemoro, concedida por el Ayuntamiento de este municipio, en reconocimiento a su labor, y la de sus trabajadores, en la lucha contra el Covid-19, en un acto presidido por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y celebrado en la Plaza de la Constitución de esta localidad.
La medalla fue recogida por el gerente y la directora médico del hospital, Juan Antonio Álvaro de la Parra y la Dra. Marta Sánchez Menam, respectivamente, de manos de la presidenta de la Comunidad de Madrid y del alcalde de Valdemoro, Sergio Parra, en un acto organizado por el Ayuntamiento en homenaje y recuerdo a todas las víctimas del Covid-19 del municipio y a todos los vecinos y trabajadores de servicios esenciales -sanitarios, de emergencias, seguridad ciudadana, limpieza viaria, servicios sociales y sectores alimentario, hostelero, farmacéutico y de distribución- que desempeñaron su importante labor durante la fase más aguda de la crisis.
"Este es un acto que debemos a quienes más han sufrido esta pandemia: aquellos que nos han dejado a consecuencia de ella y sus familiares, en quienes han dejado un enorme vacío, en gran parte también por las duras medidas y condiciones que este virus ha impuesto, y que han impedido a los afectados marcharse acompañados de sus seres queridos, y a estos despedirse de ellos como todos merecemos y necesitamos", dijo Álvaro de la Parra tras agradecer al consistorio, en nombre de los cerca de mil profesionales del hospital, "este reconocimiento, que es todo un honor, y que llevaremos con el orgullo y compromiso de lo que representa".
Reto pasado, presente y futuro
Y es que Valdemoro fue una de las primeras zonas de Madrid, y de España, en resultar afectada por las consecuencias de este virus que, dijo, "nos ha enfrentado al mayor reto sanitario de las últimas décadas, pero al que afortunadamente hemos sabido dar batalla y demostrar nuestra fortaleza, compromiso y humanidad".
Así, ya desde los primeros días marzo, el Hospital Universitario Infanta Elena tuvo que recurrir a toda su capacidad de anticipación, adaptación y coordinación para dar respuesta al inicio de la crisis. Tanto que, para la declaración del estado de alarma, "los espacios del hospital se habían transformado para acoger a todos los pacientes que lo necesitaron; se habían adquirido los recursos necesarios para que a ningún paciente le faltara un equipo o un profesional médico encargado de su atención; se aplicaban cada día innovaciones y nuevos conocimientos al tratamiento del coronavirus; la plantilla se había ‘reinventado’ y adaptado con visión colaborativa para que todos fueran útiles en algún punto del hospital; y contábamos con todos los materiales de protección necesarios", recordó su gerente.
En este proceso coordinado contó con el apoyo y colaboración de otros hospitales de Madrid y con un equipo humano y profesional del máximo nivel. "Han sabido dar lo mejor de cada uno en las peores circunstancias -continuó Álvaro de la Parra-: trabajar en equipo, compartir conocimientos y experiencias, tomar decisiones de forma conjunta para optimizar los resultados, poner a disposición de los pacientes su tiempo y el de los suyos, ofreciéndoles sus cuidados, entrega, compromiso, profesionalidad, responsabilidad, respeto, humanidad… Y siempre, siempre, además con una sonrisa".
Una sonrisa que dio a muchos pacientes ilusión, esperanza, fuerzas y el calor que no podían tener de sus familias. "Porque nuestros profesionales nunca olvidan que cada paciente es una persona, y que detrás de cada una hay una familia que sufre", añadió el gerente, destacando también que, gracias al personal del hospital, incluso durante el pico más agudo de la pandemia, se pudo seguir ateniendo a todos los pacientes no Covid que lo necesitaban, adaptando las circunstancias para que éstas no perjudicaran la salud de los pacientes.
También gracias a su implicación y profesionalidad ha sido posible en las últimas semanas reactivar la actividad asistencial del hospital en la nueva situación de convivencia con el Covid-19, asegurando y manteniendo un entorno seguro, así como preparar el centro para afrontar cualquier tipo de escenario a corto y medio plazo. "Tenemos listos protocolos eficaces y de rápida implementación, contamos con conocimientos mejorados y ampliados, dotación suficiente, profesionales preparados, y una experiencia vivida que será de gran utilidad para lo que acontezca", concluyó Álvaro de la Parra dedicando la medalla al equipo del hospital "con el que es un orgullo trabajar".